16/9/13

TEORÍA YIN YANG



Los antiguos chinos a partir de la observación de la naturaleza desarrollaron la teoría Yin Yang como explicación a los constantes cambios que tienen lugar en tierra, el hombre y el universo. Estudiaron los ciclos naturales y repetitivos del día y la noche, de las estaciones climáticas y de todos los fenómenos que tienen lugar en el hombre como la juventud, la vejez, la salud y la enfermedad.

A partir de esta observación llegaron a la conclusión que la realidad era dinámica, cambiante y relativa. Catalogaron los distintos cambios observados en cada fenómeno y los asociaron en un concepto dual que denominaron Yin Yang. En el Yin se incluía todo aquello que hacía referencia a lo estático, húmedo, frío, oscuro y femenino. En el Yang incluyeron todos sus opuestos, lo dinámico, cálido, brillante y masculino

Para los antiguos chinos el Yin y el Yang eran dos aspectos contrarios de una misma unidad, y se regían por unas leyes básicas que los relacionaban entre si de tal manera que encada aspecto asimilado a Yin existía su parte Yang y viceversa. Por ejemplo al asimilar la Tierra a yin y el Cielo a Yang, la Tierra tiene su parte Yang en la superficie y su parte más Yin en el centro profundo. A su vez cuando el Yin crecía se observo que el Yang menguaba, como ocurre al atardecer donde disminuye la claridad, y al amanecer ocurre el efecto contrario. Otra característica es que Yin y Yang son fruto de la misma unidad, se generan mutuamente y el uno no puede existir sin el otro.

La teoría del Yin Yang ha servido de base a la Medicina Tradicional China para describir la anatomía del cuerpo humano, sus funciones fisiológicas, sus patologías y sus principios terapéuticos. En este sentido se ha asimilado a Yang, entre otros aspectos, la parte dorsal y superior del cuerpo, los Fu (entrañas), la función, el Qi y los síntomas de calor. Por su parte se ha asimilado a Yin la parte frontal e inferior, los órganos Zang, la nutrición, la sangre, los líquidos orgánicos y los síndromes relacionados con el frío y la humedad.

La teoría Yin Yang nos permite conocer los distintos fenómenos que tienen lugar en el mundo y el ser humano, siendo un valioso instrumento para el diagnóstico y curación de las enfermedades. Así las patologías Yang caracterizadas por la presencia de calor, pulso rápido y piel colorada denotan una insuficiencia de yin o un exceso de Yang. Las enfermedades Yin, caracterizadas por síntomas y signos como el frío, pulso lento o rostro pálido, indican todo lo contrario, una insuficiencia de Yang o un exceso de Yin.

El equilibrio entre el Yin y el Yang es la clave para la salud, por tanto el médico siempre deberá restaurar este equilibrio en los pacientes regulando el Yin Yang, tonificando la insuficiencia y dispersando el exceso.